La pregunta sobre lo que sucede después de la muerte ha intrigado a la humanidad a lo largo de los siglos. Si bien muchos creen que la muerte es el final, un emperador chino tomó una decisión extraordinaria: decidió llevar consigo un ejército al más allá. Esta decisión llevó a uno de los hallazgos arqueológicos más sorprendentes de la historia: el Ejército de Terracota.
Hace más de 3000 años, en la antigua China, existía una fuerte creencia en la vida después de la muerte. Para los miembros de la élite, como reyes y nobles, era común ser enterrados junto a sus sirvientes, una práctica conocida como sacrificio humano. Sin embargo, la historia cambiaría radicalmente con el descubrimiento accidental de un vasto ejército de figuras de terracota en 1974, cuando unos agricultores que cavaban un pozo cerca de su aldea se toparon con uno de los hallazgos más significativos de la arqueología.
El emperador Ying Zheng y su legado
El relato del Ejército de Terracota comienza con el emperador Ying Zheng, quien ascendió al trono del estado Qin a los 13 años en 246 a.C. Con una ambición desmedida, logró unificar los siete reinos en guerra de China, convirtiéndose en Qin Shi Huangdi, el primer emperador de China. Su reinado, que se extendió por 36 años, fue marcado por innovaciones significativas.
- Introducción de un sistema unificado de medidas y pesos.
- Establecimiento de un único sistema de escritura estandarizado.
- Construcción de una barrera defensiva que más tarde se conocería como la Gran Muralla China.
Obsesionado con su legado y su mortalidad, Qin Shi Huangdi dedicó sus últimos años a buscar la inmortalidad. Emprendió expediciones en busca de elixires de vida y, en el primer año de su reinado, comenzó la construcción de una vasta necrópolis subterránea, repleta de monumentos, artefactos y un ejército de figuras de terracota que lo acompañarían en el más allá.
El Ejército de Terracota y su mausoleo
El Ejército de Terracota fue descubierto por casualidad cuando unos agricultores encontraron fragmentos de cerámica mientras excavaban un pozo. Al llamar a un equipo arqueológico, se reveló un sitio de una magnitud sin precedentes en la historia. Este ejército es parte de una necrópolis mucho más amplia, que se extiende aproximadamente 98 kilómetros cuadrados (38 millas cuadradas).
Las figuras de terracota se encuentran distribuidas alrededor de la tumba del emperador, la cual se ubica al pie del Monte Li, construida en forma piramidal. Los guerreros están alineados de tal manera que protegen el este de la tumba, frente a las regiones conquistadas por el emperador. A lo largo de los años, se han encontrado más de 7,000 figuras humanas, muchas de las cuales han sido reensambladas desde sus fragmentos originales.
Pits y su organización
Se han excavado cuatro fosas principales, que tienen aproximadamente 7 pies de profundidad y están situadas a 1.5 kilómetros al este del montículo funerario. Las figuras en estas fosas están dispuestas estratégicamente para proteger al emperador desde el este. Según estimaciones de 2007, las tres fosas que contienen el Ejército de Terracota albergan más de 8,000 soldados, 130 carros de guerra con 520 caballos y 150 caballos de caballería.
Fosa 1
La Fosa 1 es la más grande de las cuatro, con 230 metros de largo y 62 metros de ancho. Contiene 11 corredores, la mayoría de 3 metros de ancho, pavimentados con ladrillos. Un techo de madera soportado por vigas grandes cubría la estructura, la cual estaba recubierta de esteras de juncos y arcilla para asegurar su impermeabilidad, elevándose hasta 2 o 3 metros sobre el nivel del suelo circundante.
Fosa 2
La Fosa 2, aproximadamente la mitad del tamaño de la Fosa 1, alberga unidades de caballería e infantería, así como carros de guerra que se cree representan una guardia militar. Esta fosa contiene alrededor de 80 carros de guerra, cada uno con dos jinetes y un conductor, además de tropas armadas.
Otras fosas
La Fosa 3 se considera el puesto de mando, donde se encuentran oficiales de alto rango y un carro de guerra. La Fosa 4 parece estar vacía, lo que sugiere que pudo haber quedado incompleta cuando el emperador falleció.
Producción del Ejército de Terracota
Los arqueólogos han debatido durante años las técnicas utilizadas para crear estas miles de figuras en un lapso relativamente corto. Cada soldado es de tamaño natural y presenta diferentes rasgos faciales, que se pueden determinar por su peinado, tocados y rangos. Originalmente, estas figuras estaban pintadas, pero la exposición al aire y la luz provocó que la pintura se descascarara rápidamente.
Las figuras se fabricaron en talleres por trabajadores del gobierno y artesanos locales, aprovechando la abundancia de terracota en la región. Este material no solo era duradero, sino que también resultaba más accesible para la producción en masa.
Características distintivas del Ejército de Terracota
Un estudio realizado en 2014 por investigadores de University College London analizó 30 orejas de las figuras para comprobar la variabilidad entre ellas. Los resultados sugirieron que, si las figuras representaban personas reales, las diferencias entre ellas eran necesarias.
Las cabezas, brazos, piernas y torsos fueron creados por separado y luego ensamblados utilizando un proceso de luting. Cada figura fue colocada en las fosas en formaciones militares precisas, según su rango y función.
Formas faciales
Las figuras varían en altura según sus roles, con los generales siendo los más altos. Un análisis de las formas faciales revela que pueden clasificarse en ocho tipos diferentes, cada uno con características que se asemejan a caracteres chinos.
Peinados
Los peinados en la antigüedad no solo eran parte del estilo personal, sino que reflejaban el estatus social. Dependiendo del rango, los guerreros tenían diferentes estilos de peinado, que incluían:
- Moño a un lado de la cabeza.
- Trenzas con un moño cubierto por un sombrero.
Ropa
Cada rango tenía vestimenta distintiva, facilitando la identificación de su posición en el ejército. Por ejemplo:
- Generales: Ropa de alta calidad, con dos capas de túnicas bajo una armadura.
- Caballería: Usan cascos y armaduras ligeras, diseñadas para la movilidad.
- Conductores de carros: Protección adicional para sus brazos y manos.
- Guerreros armados: Capas pesadas que cubren todo el torso.
La producción de estas figuras se realizó mediante un proceso de fabricación en serie, donde las partes eran creadas y ensambladas después de ser cocidas, garantizando así la estandarización.
Proceso de creación de un guerrero de terracota
- Paso 1: Recolección de arcilla de terracota.
- Paso 2: Fabricación de las partes (cabeza, torso, brazos, piernas).
- Paso 3: Ensamblaje de las partes.
- Paso 4: Detallado de las figuras.
- Paso 5: Cocción en un horno.
- Paso 6: Pintura de las figuras.
Las armas del Ejército de Terracota
La mayoría de los guerreros originalmente sostenían armas reales, lo que aumentaba su realismo. Aunque muchas de estas armas no han sobrevivido, se han recuperado más de 40,000 objetos de bronce, incluyendo espadas, dagas, lanzas y ballestas. La conservación de estas armas se atribuye a las condiciones del suelo donde fueron enterradas.
Diversidad de figuras de guerreros
Las figuras de terracota son de tamaño natural y presentan variaciones en altura, uniforme y peinado, dependiendo de su rango. Se clasifican en varios tipos:
- Infantería armada.
- Infantería no armada.
- Conductores de carros.
- Arquero de rodillas.
- Generales y oficiales superiores.
A cada figura se le otorgaba un acabado de color, utilizando piedras preciosas molidas y otros pigmentos naturales que les daban un aspecto vibrante.
Exhibiciones del Ejército de Terracota
La primera exhibición de estas figuras fuera de China tuvo lugar en la National Gallery of Victoria en Melbourne en 1982. En 2007, el British Museum organizó una exposición que incluyó 120 objetos de la necrópolis y 12 guerreros de terracota, convirtiéndose en uno de los eventos culturales más exitosos del Reino Unido.
La exhibición atrajo a aproximadamente 400,000 visitantes, agotando las entradas con rapidez y haciendo que el museo extendiera sus horarios de apertura. La popularidad del Ejército de Terracota ha hecho que se le considere uno de los hallazgos más importantes, comparable solo al de los restos del RMS Titanic en términos de atracción de multitudes.