La historia de Thomas Fitzpatrick, un piloto aficionado que se destacó por sus audaces hazañas aéreas, es un testimonio fascinante de lo que puede suceder cuando la valentía y el alcohol se combinan. A lo largo de su vida, este veterano de la Segunda Guerra Mundial no solo sorprendió al mundo con sus inusuales aterrizajes en las calles de Nueva York, sino que también dejó una huella imborrable en la cultura popular, hasta el punto de que un cóctel lleva su nombre. Su vida es un recordatorio de los límites de la locura y el ingenio humano.
¿Quién fue Thomas Fitzpatrick?
Nacido en 1930 en el barrio de Washington Heights, en Nueva York, Fitzpatrick creció en un entorno donde la aventura era parte de su ADN. Desde temprana edad demostró su espíritu indomable al mentir sobre su edad y unirse a los Marines de los EE. UU. a los 15 años durante la Segunda Guerra Mundial. Durante su servicio militar, recibió formación en el vuelo de aviones de reconocimiento, lo que despertó su amor por la aviación.
Tras su paso por los Marines, se unió al Ejército de EE. UU. y fue destinado a Japón. Sin embargo, sus planes de regresar a casa se complicaron con la llegada de la Guerra de Corea. Fitzpatrick se convirtió en el primer neoyorquino herido en Corea, cuando fue atacado mientras transportaba municiones. Este acto de valentía le valió una medalla Purple Heart.
El interés por volar lo llevó a inscribirse en la Teterboro School of Aeronautics, donde perfeccionó sus habilidades. Con el tiempo, se convirtió en mecánico de aviones, combinando su pasión con su trabajo. Sin embargo, su vida estaba a punto de dar un giro inesperado que lo convertiría en una figura legendaria en la historia de la aviación urbana.
El primer aterrizaje de Fitzpatrick en Manhattan
La madrugada del 30 de septiembre de 1956, Fitzpatrick, ahora de 26 años, disfrutaba de una noche de copas en un bar local. Tras un desafío de sus amigos, apostó que podía volar de Nueva Jersey a Nueva York en solo 15 minutos. Impulsado por esta apuesta y su espíritu aventurero, robó un avión monomotor de su escuela de vuelo, despegando sin luces ni radio.
Su plan inicial era aterrizar en un parque cercano, pero la falta de visibilidad lo llevó a una decisión audaz: aterrizar en la Avenida St. Nicholas, justo en medio de la agitada vida urbana de Manhattan. Al amanecer, los residentes se encontraron con la sorprendente imagen de un avión posado en su calle.
- El suceso llamó la atención de los medios, siendo destacado por el New York Times como un “logro de la aeronáutica”.
- A pesar de la gravedad de su acto, el propietario del avión decidió no presentar cargos.
- Fitzpatrick fue multado con solo $100 por sus acciones, lo que habla de la incredulidad general ante su hazaña.
Las impresiones de testigos de aquel evento fueron diversas. Jim Clarke, un vecino, recordó que Fitzpatrick intentaba aterrizar en el campo de la George Washington High School, pero la oscuridad lo llevó a la Avenida St. Nicholas. Sam Garcia, un niño en ese entonces, pensó que era una broma, incapaz de creer que un hombre pudiera aterrizar en una calle tan estrecha.
Un segundo aterrizaje sorprendente
Dos años más tarde, el 4 de octubre de 1958, Fitzpatrick volvió a hacer historia. Esta vez, pilotó un Cessna 120 y aterrizó en la calle Amsterdam, justo en frente de la Yeshiva University. Esta acción no fue provocada por una apuesta, sino por incredulidad de los presentes en un bar sobre su habilidad para repetir la hazaña. Sin embargo, el alcohol jugó un papel importante en su decisión.
A las 12:15 a.m., los residentes se despertaron con el sonido de su aterrizaje, que se realizó entre coches estacionados y el tráfico. Nuevamente, Fitzpatrick desapareció misteriosamente después del acto, pero la policía lo identificó rápidamente gracias a los testigos. A pesar de sus intentos de negar su participación, finalmente se vio obligado a confesar.
- La falta de licencia de piloto, suspendida tras su primer incidente, complicó aún más su situación.
- Durante este aterrizaje, un conductor de autobús quedó boquiabierto, cuestionando la lógica de que un avión pudiera aterrizar en medio de la ciudad.
- La imprudencia de Fitzpatrick lo llevó a enfrentar serias consecuencias legales.
Consecuencias legales de sus audaces hazañas
Ambas acciones de Fitzpatrick no solo lo convirtieron en una figura popular, sino que también lo llevaron a enfrentar serias repercusiones legales. En su primer aterrizaje, aunque fue acusado de varios delitos, el propietario del avión decidió no presentar cargos, lo que resultó en una multa relativamente baja. Sin embargo, su segunda hazaña fue recibida con menos benevolencia.
En su segundo aterrizaje, Fitzpatrick enfrentó múltiples cargos, incluyendo:
- Gran robo.
- Operación peligrosa y temeraria de un avión.
- Violación de regulaciones de la Administración de Aeronáutica Civil por volar sin licencia.
- Aterrizaje no autorizado dentro de los límites de la ciudad.
El juez John A. Mullen sentenció a Fitzpatrick a seis meses de prisión, señalando que su imprudencia podría haberse evitado. Fitzpatrick, tras este episodio, dio un giro a su vida y se dedicó a trabajar como Steamfitter, estableciendo una familia con su esposa, Helen, y sus tres hijos. A pesar de los momentos de locura en su juventud, su vida posterior fue más tranquila.
Legado y cultura popular
La historia de Thomas Fitzpatrick ha trascendido el tiempo, convirtiéndose en un relato fascinante de audacia y locura. Su vida ha sido objeto de interés en diversas plataformas, desde documentales hasta publicaciones en redes sociales, donde muchos se maravillan de su valentía y temeridad. Por su hazaña, incluso se le atribuyó la creación de un cóctel llamado “Late Night Flight”, en honor a sus aventuras nocturnas.
A pesar de su prematura muerte a los 79 años, el legado de Fitzpatrick perdura como un recordatorio de que la vida está llena de momentos inesperados y que, a veces, la locura puede llevar a hazañas extraordinarias. Su historia sigue cautivando a aquellos que la conocen, inspirando a nuevas generaciones a volar alto, aunque sea solo en sus sueños.

























