Desde el siglo XIX, el uso de barriles para ocultar cuerpos ha sido una práctica macabra pero notablemente recurrente en la crónica criminal. Este método de deshacerse de víctimas ha fascinado a historiadores y criminólogos, no solo por su crudeza, sino también por la historia que cada caso encierra. A medida que exploramos estos casos, se revela una complejidad en la mente criminal que utiliza barriles como instrumento de ocultación.
El primer «asesinato en barril»: el caso de Sophie Werner
En abril de 1858, un grupo de trabajadores en la casa de carga del ferrocarril Hudson Valley, en Nueva York, se topó con un fétido olor proveniente de un barril de madera. Al abrirlo, encontraron el cuerpo desmembrado de una mujer. Este horroroso descubrimiento condujo a la investigación del asesinato de Sophie Werner, una inmigrante holandesa. El principal sospechoso, Henry Jumpertz, defendió la teoría de que Sophie se había suicidado. Sin embargo, su accionar posterior, que incluyó desmembrar el cuerpo y enviarlo cubierto de sal en un barril, lo convirtió en el principal acusado de un caso que capturó la atención internacional.
Jumpertz fue finalmente condenado, aunque su sentencia fue revocada en apelación, lo que dejó un manto de dudas sobre la justicia en este caso. Este incidente marcó el inicio de una serie de asesinatos que implicarían barriles como el medio elegido para ocultar cuerpos, estableciendo un patrón que se repetiría a lo largo de los años.
Más asesinatos en barriles: el caso de Edward Reinhardt
Veinte años después, en 1878, otro caso perturbador surgió en Nueva York. Edward Reinhardt, acusado de asesinar a su esposa, ofreció la misma defensa que Jumpertz: su esposa se había suicidado. Sin embargo, el hallazgo de su cuerpo, desmembrado y encontrado en un barril cerca de Staten Island, refutó esta afirmación. Este patrón de desmembramiento y transporte de cuerpos en barriles continuó, evidenciando una frialdad y un cálculo en los crímenes, que parecían estar influenciados por la creciente violencia organizada de la época.
Los barriles como herramienta de crimen: un fenómeno global
El uso de barriles para ocultar cuerpos no es exclusivo de la mafia o de criminales organizados; se ha convertido en un fenómeno observado en todo el mundo. Los barriles, que pueden variar desde los de madera hasta los de acero o plástico, ofrecen una forma eficaz de transportar y esconder un cuerpo. Este método ha sido utilizado por asesinos en diversas circunstancias, desde crímenes pasionales hasta asesinatos por encargo.
- Practicidad: Los barriles son relativamente fáciles de obtener y manejar, lo que los convierte en una opción popular para el ocultamiento.
- Discreción: La forma y el tamaño de los barriles permiten que sean transportados sin llamar la atención.
- Concealment: Ofrecen un medio eficaz para ocultar el olor y la apariencia de un cuerpo en descomposición.
El hallazgo en el lago Mead: un nuevo capítulo en la historia de los barriles
Recientemente, el hallazgo de un conjunto de restos humanos dentro de un barril corroído en el Lago Mead, cerca de Las Vegas, ha reavivado el interés por esta inquietante práctica. Los restos, que presentaban signos de haber sido disparados, han llevado a la policía a especular sobre la conexión de este caso con la historia criminal de la ciudad, especialmente con la mafia. La vestimenta de la víctima, datada en los años 70, sugiere que el crimen podría haber ocurrido en esa época, coincidiendo con otras desapariciones notables de figuras del crimen organizado.
La elección de un barril como medio para ocultar cuerpos no es casual. Los asesinos a menudo eligen este método por una mezcla de pragmatismo y simbolismo. En este caso, el crimen podría haberse motivado por deudas de juego o disputas personales, donde el barril se convierte en un símbolo de venganza y ocultación.
¿Quién era la víctima del barril en el Lago Mead?
Las investigaciones apuntan a que la víctima podría ser una de varias personas desaparecidas con conexiones al crimen organizado. Algunos de los candidatos incluyen:
- George «Jay» Vandermark: Desaparecido en 1976 tras robar entre 7 y 15 millones de dólares de casinos.
- William Crespo: Un narcotraficante que desapareció en 1983 antes de testificar contra varios ejecutivos de Argent Corporation.
- Johnny Pappas: Un empleado de casino con conexiones mafiosas que fue visto por última vez en 1976.
El misterio de la identidad de la víctima sigue sin resolverse, pero las especulaciones continúan. Las conexiones con el crimen organizado y el uso de un barril como medio de ocultación hacen que este caso sea un recordatorio escalofriante de las prácticas violentas del pasado.
El infame asesinato de Benedetto Madonia en 1903
Uno de los casos más notorios en la historia criminal de Nueva York fue el asesinato de Benedetto Madonia, cuyo cuerpo fue encontrado en un barril en 1903. Este caso reflejó la brutalidad de las pandillas de la época, particularmente la Morello, un grupo vinculado a la mafia. Madonia, quien había sido asesinado por traición, fue desmembrado y su cuerpo ocultado en un barril, una acción que envió un mensaje de advertencia a otros potenciales traidores.
La naturaleza del crimen, con la cabeza de Madonia casi severada y su cuerpo mutilado, mostró la desesperación y la violencia que reinaban en el submundo criminal de Nueva York. Este caso, junto con muchos otros, reveló cómo los barriles se convirtieron en el símbolo de la mafia y su modus operandi para lidiar con quienes consideraban traidores.
Asesinatos en barriles a través de las décadas
A lo largo de los años, numerosos crímenes han implicado el uso de barriles como medio para ocultar cuerpos. Aunque algunos de estos casos están relacionados con el crimen organizado, muchos otros involucran a individuos comunes. Aquí algunos ejemplos significativos:
- 1906: Ebervale, Pennsylvania – Un cazador encontró el cuerpo de una mujer en un barril parcialmente quemado.
- 1911: Rochester, Nueva York – Un agricultor descubrió el cuerpo desmembrado de Francesco Manzella en un barril.
- 1927: Bellaire, Ohio – Un hombre fue encontrado estrangulado dentro de un barril de whisky.
- 1946: Joliet, Illinois – Arthur Blaurock fue asesinado y su cuerpo fue colocado en un barril en una carnicería.
- 1992-1999: Snowtown, Australia – Un caso de asesinos en serie que involucró cuerpos encontrados en barriles.
Estos casos no solo son escalofriantes por su brutalidad, sino que también ofrecen una visión sobre la psicología criminal y las motivaciones que llevan a los individuos a elegir métodos tan grotescos de ocultación.
La historia de los asesinatos en barriles es un testimonio de la oscura capacidad humana para la violencia y el engaño. A medida que se desenterran más casos y se revelan más detalles, se nos recuerda que el pasado no solo queda atrás, sino que puede resurgir de las profundidades de la historia, tal como lo ha hecho el barril encontrado en el Lago Mead.