Hace ochenta años, la infame silla eléctrica de Sing Sing, conocida como “Old Sparky”, ejecutó a un trío de notables criminales: Louis Capone, Emanuel “Mendy” Weiss y Louis “Lepke” Buchalter. Este evento marcó un hito en la historia del crimen organizado en Estados Unidos, poniendo fin a una saga de violencia y traición en el seno de la Mafia.
Las ejecuciones, que tuvieron lugar el 4 de marzo de 1944, no solo simbolizaron la caída de estos tres hombres, sino que también representaron el desenlace de las investigaciones sobre Murder Inc., la temida facción encargada de los asesinatos por encargo dentro del mundo del crimen. A lo largo de los años, las revelaciones sobre sus crímenes conmocionaron a la sociedad y llevaron a múltiples juicios que expusieron la brutalidad de estas operaciones delictivas.
La caída de un imperio criminal
La historia de Lepke Buchalter es un claro ejemplo de cómo la ambición y la traición pueden llevar a la autodestrucción. Desde sus inicios en el submundo del crimen, su carrera estuvo marcada por un constante conflicto con la ley. En 1936, mientras se encontraba bajo fianza por violaciones a las leyes antimonopolio, Buchalter y su socio, Jacob “Gurrah” Shapiro, empezaron a evadir a las autoridades, que ya lo buscaban por narcotráfico y otros delitos graves.
La situación se complicó aún más cuando, en 1939, Buchalter se entregó al director del FBI, J. Edgar Hoover, creyendo que había llegado a un acuerdo que lo protegería de ser juzgado por el fiscal de distrito de Nueva York, Thomas Dewey. Sin embargo, esta esperanza resultó ser un espejismo, ya que no había ningún trato a su favor, lo que lo llevó a enfrentar una serie de juicios que culminarían en su ejecución.
Los inicios de Murder Inc.
La creación de Murder Inc. surgió en un contexto donde el crimen organizado se consolidaba como una poderosa fuerza en Estados Unidos. Este grupo, conocido internamente como la “Combinación”, operaba desde una tienda de caramelos en Brooklyn y estaba compuesto por los más temibles asesinos a sueldo de la época. Su notoriedad se disparó cuando comenzaron a circular testimonios que revelaban sus métodos brutales y su conexión con líderes mafiosos como Buchalter.
Uno de los casos emblemáticos que llevó a la exposición de Murder Inc. fue el asesinato del comerciante Joseph Rosen en 1936. Este crimen, que inicialmente parecía aislado, se conectó con un patrón de eliminación de posibles testigos y disidentes dentro del mundo del crimen, lo que llevó a las autoridades a investigar más a fondo. La información recopilada por informantes y ex miembros del grupo fue fundamental para desmantelar esta red de terror.
El proceso judicial
El juicio de Buchalter, Weiss y Capone no solo fue un evento judicial, sino un espectáculo mediático que atrajo la atención de toda la nación. A medida que avanzaban las audiencias, parecía que las evidencias en su contra, aunque consistentes, eran a menudo cuestionadas. Sin embargo, la presión de la opinión pública y el deseo de justicia sobrepasaron los obstáculos legales.
Durante el juicio, se evidenciaron las tensiones entre las autoridades estatales y federales, complicando aún más el proceso. Los fiscales se enfrentaron a la dificultad de garantizar que Buchalter, quien ya cumplía una sentencia federal, fuera entregado para ser juzgado en Nueva York sin que se le garantizara un futuro favorable. Finalmente, después de tres años de apelaciones y maniobras legales, los tres hombres fueron condenados a muerte.
La ejecución de los condenados
El 4 de marzo de 1944, después de una espera prolongada y angustiante, los tres hombres se prepararon para su destino final. La rutina de la ejecución estaba marcada por un protocolo que dictaba que el condenado considerado más débil sería ejecutado primero. Louis Capone fue el primero en entrar en la cámara de ejecución, seguido por Weiss y finalmente Buchalter, quien observó en silencio su inminente destino.
- Capone fue declarado muerto a las 11:05 p.m. tras una rápida ejecución.
- Weiss, quien afirmó ser inocente justo antes de su muerte, siguió poco después.
- Buchalter, con su característica actitud desafiante, fue el último, falleciendo a las 11:16 p.m.
Los testimonios de los testigos que presenciaron las ejecuciones revelan que Buchalter, a pesar de su reputación y el miedo que inspiraba, enfrentó su final con una calma que sorprendió a muchos. Su silencio fue interpretado por algunos como un mensaje de lealtad a aquellos que aún operaban dentro del mundo del crimen.
El legado de Murder Inc.
Las ejecuciones de Buchalter, Weiss y Capone no solo marcaron un fin para ellos, sino que también simbolizaron un cambio en la lucha contra el crimen organizado en Estados Unidos. La atención mediática y el deseo de los funcionarios de justicia por desmantelar el poder de la Mafia llevaron a una serie de investigaciones que afectarían a muchas otras figuras del crimen en los años siguientes.
La ejecución de Buchalter es notable por ser la primera y única en la historia de un jefe mafioso de alto rango en América. Este hecho ha dejado una huella indeleble en la cultura popular y en la narrativa sobre el crimen organizado, consolidando su figura en la historia del país.
La historia de Murder Inc. y sus protagonistas, incluidos los últimos momentos de Buchalter, se ha convertido en un símbolo de la lucha entre la ley y el crimen, donde la justicia, aunque tardía, finalmente prevaleció en un oscuro capítulo de la historia estadounidense.
Christian Cipollini es autor de Murder Inc.: Mysteries of the Mob’s Most Deadly Hit Squad y LUCKY, una novela gráfica sobre gánsteres.