Asesinato sin resolver de la familia Dardeen

La noche del 18 de noviembre de 1987, un macabro hallazgo sacudió a la pequeña comunidad de Ina, Illinois. En un trailer aislado, se descubrió la brutal escena de un crimen que marcaría la historia local: el cuerpo sin vida de Ruby Elaine Dardeen, quien había sido salvajemente golpeada, lo que provocó que entrara en trabajo de parto. Junto a ella, se encontró a su bebé, también víctima de una muerte violenta. Al principio, las sospechas se centraron en su esposo, Russel Keith Dardeen, pero el desenlace de la historia sería aún más trágico.

Al día siguiente, el cuerpo de Keith fue encontrado en un campo de trigo cercano, con signos de haber sido ejecutado. Su muerte, junto con la de su familia, se convirtió en uno de los casos más horrendos y sin resolver de la historia del crimen estadounidense. La brutalidad del crimen fue tal que los detalles de la escena del crimen fueron considerados demasiado gráficos para ser presentados en televisión diurna.

¿Quién era la familia Dardeen?

La familia Dardeen estaba compuesta por Russell Keith Dardeen, de 29 años, su esposa Ruby Elaine Dardeen, de 30, y su hijo de 2 años, Peter. La pareja esperaba con ansias la llegada de su segundo hijo, planeando nombrarlo Ian o Casey, dependiendo de su sexo.

En 1986, Keith adquirió un trailer tras completar su formación como operador en una planta de tratamiento de aguas. El hogar de la familia se ubicaba en un terreno alquilado de una pareja de granjeros, rodeado de bosques y cerca de la Ruta 37, justo a las afueras de Ina. La vida en el trailer estaba marcada por la simpleza, donde ambos padres trabajaban: Keith en la planta de tratamiento y Elaine en una tienda de suministros de oficina en Mount Vernon. Además, participaban en un grupo musical en su iglesia bautista local.

A pesar de sus planes de mudanza a un área más segura, motivados por la creciente violencia en la región —donde se habían reportado 15 homicidios en los últimos dos años—, el sentido de seguridad de la familia se desvanecía. Keith, cada vez más protector, llegó al punto de negarse a dejar que una joven usara su teléfono una noche que ella se acercó a su trailer.

Los eventos trágicos de la familia Dardeen

El 18 de noviembre de 1987, el comportamiento de Keith resultó extraño; no se presentó en su trabajo, lo que alarmó a su supervisor. Tras intentar comunicarse sin éxito, la preocupación creció y los padres de Keith fueron alertados. Juntos, se dirigieron a la casa familiar donde harían un descubrimiento que les marcaría de por vida.

Al entrar al trailer, se encontraron con una escena dantesca: los cuerpos de Elaine, Peter y el recién nacido estaban en la misma cama. Ambos, madre e hijo, habían sido atados y amordazados con cinta adhesiva, y la violencia que había estallado en el hogar había sido tal que Elaine, en su estado avanzado de embarazo, había entrado en trabajo de parto. El arma utilizada en el crimen fue un bate de béisbol, un regalo que Keith le había hecho a su hijo. El horror continuaba, ya que la vida del recién nacido también fue extinguida.

Mientras la familia era encontrada en esta situación trágica, Keith seguía desaparecido. Sin embargo, su cuerpo sería descubierto al día siguiente en un campo cercano, con tres disparos en la cabeza y su genitalidad grotescamente mutilada. Las autopsias no lograron determinar con certeza el orden de los asesinatos, pero sí se estableció que todos habían sido asesinados en un lapso de una a dos horas.

El impacto en la comunidad

La noticia de esta masacre familiar se propagó rápidamente, dejando a la comunidad de Ina en un estado de shock y miedo. La sensación de inseguridad se disparó, lo que llevó a muchos residentes a adquirir armas y sistemas de seguridad. La gente que antes dejaba sus puertas sin trancar ahora se aseguraba de que todo estuviera bajo llave.

A pesar de los esfuerzos de 30 detectives que trabajaron intensamente en la investigación y las entrevistas a más de 100 personas, los investigadores se encontraron estancados, sin pistas significativas que esclarecieran el motivo detrás de estos crímenes horrendos.

Posibles motivos detrás del crimen

Una de las mayores dificultades en la investigación fue establecer un motivo claro para el asesinato. La puerta trasera del trailer estaba desbloqueada y no había señales de entrada forzada. Objetos de valor, como una VCR y una cámara portátil, permanecieron intactos, así como el efectivo y las joyas en el hogar. La mutilación sexual de Keith hizo que se considerara un crimen de carácter sexual, pero se descartó esa hipótesis.

• La falta de pruebas de infidelidades por parte de Keith o Elaine.
• La ausencia de rencores conocidos o problemas financieros.
• Unos papeles de resultados deportivos encontrados en la casa plantearon la posibilidad de deudas de juego, aunque su madre aseguró que Keith era extremadamente frugal.

Además, aunque se encontró una pequeña cantidad de marihuana en el trailer, no había pruebas concluyentes de que la familia estuviera involucrada en el tráfico de drogas. La madre de Keith sugirió que podría haber pertenecido al asesino.

Joeann Dardeen, la madre de Keith, especuló en varias ocasiones sobre las posibles motivaciones detrás del asesinato, sugiriendo que pudo haber alguien que quería que Keith se involucrara en el tráfico de drogas, o que alguien relacionado con Elaine podría haber reaccionado violentamente ante su rechazo. La naturaleza brutal del crimen llevó a algunos a sugerir que podría ser obra de un culto, aunque no se encontraron símbolos rituales en el lugar del crimen.

La confesión de Tommy Lynn Sells

Una de las pistas más significativas en la investigación llegó en el año 2000, cuando el asesino en serie Tommy Lynn Sells fue arrestado por el asesinato de dos jóvenes en Texas. Durante su detención, Sells afirmó haber cometido el asesinato de la familia Dardeen, junto con otros 70 crímenes no resueltos.

A pesar de que Sells fue vinculado a al menos 22 asesinatos, los investigadores no lograron establecer un vínculo concreto con el caso Dardeen. Aunque sus declaraciones contenían algunos detalles correctos, también presentaban inconsistencias y eran a menudo vagas.

Sells afirmaba haber conocido a Keith en un lugar de encuentro, pero los relatos de su encuentro variaban. La madre de Keith, Joeann, desestimó sus afirmaciones, recordando la naturaleza protectora y dedicada de su hijo hacia su familia.

A pesar de que en un principio Joeann creía en la culpabilidad de Sells, con el tiempo se dio cuenta de que sus declaraciones eran poco confiables. Finalmente, Sells fue ejecutado en 2014, y la familia Dardeen sigue sin tener justicia, con el caso aún sin resolver.

Teorías sobre los asesinatos de la familia Dardeen

Con el paso de los años, han surgido varias teorías sobre los asesinatos, pero ninguna ha logrado proporcionar un motivo claro. La teoría de que alguien había intentado forzar a Keith a involucrarse en el tráfico de drogas, o que un antiguo amante de Elaine pudo haber estado detrás del ataque, se han repetido a lo largo de los años.

La historia de la familia Dardeen es un trágico recordatorio del potencial de la violencia en las comunidades, y la falta de resolución en el caso enfatiza el dolor persistente de la pérdida. Más de tres décadas después, la brutalidad de su asesinato sigue siendo un misterio, y la comunidad de Ina continúa buscando respuestas que parecen inalcanzables.